Francis es una de las residentes internacionales del Santuario de Grandes Simios de Sorocaba, SP, y una de las hembras más ancianas.
Su historia es triste, comenzando cuando fue capturada y llevada aún bebé de África a un laboratorio de investigación médica en Estados Unidos. No tenemos mucha información detallada de este período en el laboratorio, pero cuando se hizo adulta pasó a vivir en un zoológico en el estado de Colorado. Algunos años después fue enviada de allí con otra chimpancé, Queenie, al Zoológico Vesty Pakos, en La Paz, Bolivia.
En 2003, este zoológico ya no tenía las condiciones para cuidar de las dos y finalmente fueron enviadas al santuario en Brasil. Francis y Queenie vivieron juntas y en armonía hasta 2011, cuando esta última lamentablemente falleció.
El comienzo de la vida de Francis fue muy duro, pero tuvo la suerte de encontrar una vida digna en el santuario. Después de la muerte de su gran compañera, ya ha compartido el recinto con algunos otros chimpancés. Ella es muy reservada y no aprecia el contacto con humanos, debido a los sufrimientos que ha pasado. Pero no le gusta estar sola y busca la compañía de otros chimpancés. Actualmente interactúa bastante con Simon (Sam).