22/junio/2010
La “Casa Amarilla” albergó desde 1913 la denominada Estación de Antropoides de Tenerife, por iniciativa de la Academia Prusiana de Ciencias y ubicado en el Puerto de la Cruz (Tenerife). En este centro se comenzaron a realizar estudios para demostrar las capacidades cognitivas de los grandes simios, albergando en su interior a chimpancés y varios orangutanes uno de los cuales murió al poco tiempo de llegar. El primer Director del Centro, Eugen Teuber (1889-1958), un experto en Lenguaje, llegó a la conclusión de que la comunicación del hombre con los chimpancés era posible, mediante la expresión de gestos manuales. (Estudios posteriores se ha confirmado la capacidad de los grandes simios de aprender el lenguaje de signos humanos). El segundo Director Wolfgang Köhler (1887-1967), psicólogo, realizó estudios sobre la capacidad de resolución de problemas que se tradujeron en una importante serie de informes científicos y un libro ya clásico “Experimentos sobre la inteligencia de los chimpancés”.