El bosque de Ebo es una de las zonas más ricas en especies de todo el Golfo de Guinea. Cubre más de 141.706 hectáreas en la región litoral de Camerún. Este bosque es el hábitat de más de 160 especies de aves y primates en peligro de extinción como los mandriles, la única población de colobo rojo de Preus del país, loros grises, el elefante pigmeo o llamado también del bosque, de nos 700 individuos aproximadamente de la subespecie de chimpancé de Camerún-Nigeria en grave peligro de extinción y de una población de gorilas descubierta en 2002 y que pudiera ser una nueva subespecie del Gorila Occidental al encontrarse aislada de otras poblaciones de gorilas en más de 200 kilómetros. De igual forma en el interior de este bosque se hallan 12 especies de árboles recientemente descubiertas como nuevas para la ciencia. Ante esta biodiversidad tan variada y rica, desde 2006, se han realizado esfuerzos para declarar el Bosque de Ebo como Parque Nacional.
Durante siglos, la población de más de 40 aldeas alrededor del bosque de Ebo han vivido sin ponerlo en peligro. Los nativos respetan la tierra de sus antepasados y la utilizan para cazar, pescar, recolectar plantas en el bosque para su alimento y como medicina, llevando a cabo la agricultura a pequeña escala. Proyecto Gran Simio entiende que no se puede criminalizar la caza sin ofrecer una forma de subsistencia viable y el Gobierno de Camerún tiene los elementos necesarios para ayudar a las poblaciones a cambiar su hábito y criar animales de granja, acuicultura o agricultura de baja intensidad, como ellos mismos están solicitando. La destrucción del bosque supondrá la desaparición de sus gentes y hundirá su modo de vida y su subsistencia.
Proyecto Gran Simio apoya a las Organizaciones locales que se han levantado contra la decisión del Gobierno de Camerún. Entre ellas se encuentra el Club de los Amigos de los Gorilas que son miembros formados por la comunidad local, muchos de ellos antiguos cazadores, para supervisar y proteger la fauna local, realizando seguimientos y patrullajes. Este modelo de vigilancia local también está apoyado por el proyecto de Investigación del Bosque Ebo (EFRP) que está funcionando con éxito para cambiar los hábitos locales que llevan tiempo subsistiendo con los recursos naturales del bosque, pasando de cazadores a guardianes de los grandes simios.
El 4 de febrero de 2020, Camerún otorgó dos concesiones madereras para 150.000 hectáreas del Bosque de Ebo (Unidades de Manejo Forestal UFA 07-005 y UFA 07-006). La población local no ha sido informada ni consultada, aunque se requiere el Consentimiento Libre, Previo e Informado (CLPI).
Si esta conversión de las tierras se llevara a cabo, tendría como consecuencia daños sociales, climáticos y ecológicos devastadores. La población local, comunidad científica y ecologistas están alarmados: el hábitat de los gorilas sería completamente destruido y el de los chimpancés casi por completo. Una gran parte de los 35 millones de toneladas de carbono almacenadas en el bosque se liberaría y contribuiría a empeorar la catástrofe climática. La población indígena perdería sus medios de vida y posiblemente estaría más expuesta a nuevas enfermedades.
Por otro lado se cree que detrás de esta tala injustificada y sin ningún sentido donde van a llevar a la ruina a numerosas poblaciones y al exterminio de miles de animales entre ellos una posible subespecie nueva del Gorila Occidental, puede existir concesiones a empresas para plantaciones de monocultivo de la Palma de Aceite.
Por todo lo expuesto, Proyecto Gran Simio ha enviado una carta al Presidente de Camerún a través de la Embajada de dicho país en España y copia igualmente de la carta a la Embajada española en Camerún para su entrega al Gobierno de Camerún exigiéndole que :
– Retire las concesiones de tala.
– Respete el Acuerdo Internacional que firmó el pasado 20 de julio sobre conservación de gorilas y sus hábitats.
– Proteja el bosque de Ebo y cumpla la promesa de declararlo Parque Nacional.
– Respete los derechos tradicionales de la población local, aplicando las reglas del Consentimiento Libre, Previo e Informado (CLPI) e involucre plenamente a la población en toda planificación relativa al futuro del Bosque de Ebo.
“Una vez más, nos encontramos ante una situación grave de destrucción de la biodiversidad de nuestro planeta y un bosque idílico donde habitan numerosas especies protegidas y donde una población de gorilas posiblemente perteneciente a una nueva subespecie del Gorila Occidental desaparezca para siempre. Hacemos un llamamiento al Gobierno de España para que interceda a favor de que sea declarado Parque Nacional el Bosque de Ebo. Con ello no solo se protege su riqueza biológica sino también a las poblaciones nativas que durante milenios han convivido y desarrollado su historia evolutiva en el Bosque Ebo. Ante el anuncio de las conclusiones publicadas por el Panel Intergubernamental IPBES de la ONU compuesta de más de 400 científicos en la que a anuncian que un millón de especies y plantas se extinguirán en las próximas décadas, vemos que el problema no debe ser local sino global y los gobiernos deben llegar a acuerdos reales y efectivos en convenios internacionales de la protección de los ecosistemas de la Tierra”, ha declarado Pedro Pozas Terrados, Director Ejecutivo del Proyecto Gran Simio en España.
Proyecto Gran Simio solicita a través de esta comunicado de prensa, que la Casa Real y en concreto los Reyes de España, influyan en salvar el Bosque Ebo solicitándolo personalmente al Presidente de Camerún y que sea declarado Parque Nacional.