Los orangutanes son grandes primates, muy sociables, emocionales e inteligentes. Sorprendentemente, los orangutanes comparten 97% del mismo ADN con los seres humanos. Por desgracia, a pesar de las semejanzas genéticas y sociales que compartimos con los orangutanes, algunas personas insisten en mantener estas hermosas criaturas en cautiverio.
Un orangután en cautiverio en el zoológico de St. Louis, EE.UU., se hace cargo del problema con sus propias manos. El orangután hembra Rubih, de12 años, recogió piedras y las tiró repetidamente contra las cuatro ventanas de siete metros de altura, durante varios meses. El daño costó $ 200.000 en reparaciones, obligando al zoológico, a cerrar temporalmente la exposición. El equipo que cuida de primates del St. Louis Zoo, le enseñó Rubih, para traerles las piedras a cambio de golosinas. Pero Pero ella, comenzó a golpear las ventanas con piedras, cuando los guardianes no estaban cerca, presumiblemente, para llamar la atención de alguien para un «mimo». Rubih innovado, también quebró la base de cemento de un árbol, usando los pedazos para tirarlos contra las ventanas.
En estado salvaje, los orangutanes son conocidos para crear y utilizar herramientas como montar un paráguas hecho de hojas y un gajo de planta para cavar y encontrar comida; por lo que este comportamiento no es del todo sorprendente. Sin embargo, es profundamente triste. Rubih tiene la inteligencia para crear herramientas para lograr su objetivo – ya sea para tener golosinas o incluso, salir de su recinto – pero la naturaleza de su cautiverio la impide expresarse en todo su potencial. Si bien no podemos definir con exactitud las intenciones de este orangután, de romper las ventanas de su recinto, esto plantea una pregunta importante: ¿por qué se le niega la libertad?
Los zoológicos son de todo, menos una «diversión» para los animales. Muchos de los animales que terminan en los zoológicos, nacieron en la naturaleza y fueron capturados muy jóvenes, mientras que outros, han nacido de una vida en cautiverio. En ambos casos, estos animales conservan sus instintos y comportamientos naturales, que son atrofiados por el crecimiento en una jaula. En la naturaleza, los orangutanes viven em complejos grupos familiares, muy semejantes a nosotros . Los niños permanecen con sus madres hasta que llegan a la adolescencia y aprenden todo lo que necesitan, para sobrevivir en el medio ambiente con otros animales. Ellos viven en los bosques y pasan la mayor parte de su tiempo interactuando entre sí, explorando y alimentándose.
En cautiverio, los orangutanes son mantenidos con algunos outros, si tienen suerte. En lugar de árboles, reciben cajas de cemento y estructuras similares a los árboles falsos. Esto es comprensible causa gran sufrimiento a estos animales dinámicos. Ha habido muchos casos documentados de animales que exhiben comportamientos estereotipados, expresiones exteriores de estrés mental profundo. Estos comportamientos anormales y repetitivos, incluyen movimientos de balanceo de un lado para otro, atacándose unos a outros, de manera imprevisible o herirse deliberadamente – todo, casi nunca, son vistos en individuos salvajes. Para los animales que son tan similares a los humanos, es doloroso saber que, están sujetos a ésta vida para nuestro entretenimiento.
Los orangutanes tienen el derecho, como todos los animales, de vivir libremente en su hábitat – así como los humanos. Podemos ayudar a los animales a vivir la vida que merecen, boicoteando los zoológicos y otras instalaciones que tengan animales en cautiverio. Cuando termine el «consumo» de las visitas a los Jardines Zoológicos, acabará el sufrimiento.
Fuente (Inglés):