La gorila Kifta, de 12 años de edad, que vino para el Zoologico de Belo Horizonte, en el Brasil, junto con su compañera Kimbi, en 2011, para acompañar al Gorila macho Idi Amin, murió el pasado 28 de febrero, de edema pulmonar, según informó el Zoologico.

La Fundación John Aspinal, que tiene dos Zoologicos en la Inglaterra y reproduce gorilas, intercambiando los mismos con otros zoologicos del mundo, ahora quedó totalmente al descubierto, ya que cuando fue delineado aquel plan de marketing, a un costo de más de un cuarto de millón de dolares, pagos por los contribuyentes brasileños, para traer las dos gorilas, dijeron que habían hecho un estudio cuidadoso por especialistas.

El hecho es que el «comercio» de grandes primates que Zoologicos de Europa hacen, se muestra como extremadamente pernicioso para los propios grandes simios. Vinculos familiares son destruidos, como en este caso de dos gorilas jovens, nacidas en cautiverio, que fueron separadas de sus familias y enviadas a millares de kilometros de distancia, para proporcionar compañia a un gorila solitario y débil que también terminó muriendo poco después de la llegada de las hembras.

El «comercio» de grandes primates debe parar y solo en casos especiales y muy justificados, las autoridades CITES de Europa y de cada pais, deben autorizar la transferencia. El motivo no puede ser diversificar la colección de especies de zoologicos, si no la preservación de una especie que está en el limiar de la extinción.

Nuevamente se prueba en este caso, que lo que motivó toda esta tragedia fue el «marketing» de los zoologicos, tanto ingleses como brasileños, para servir como «entretenimiento publico» a costa de la vida valiosisima de seres que en poco años más desaparecerán de la faz de la Tierra.

Dr. Pedro A. Ynterian
Presidente, Proyecto GAP Internacional