LA DESTRUCCION DE UNA MENTE
Estamos sólos: Sofia, Samantha, Jimmy e yo. Sofia corre de un extremo a otro del corredor, salta en la reja, provoca a Jimmy, lo pellizca, mete sus manos buscandolo, cuando él intenta agarrarla, ela huye. Jimmy la sigue, ya estamos una hora en esos juegos. Samantha, la madre, aparece de vez en cuando, mira si está todo bien y nos deja sólos nuevamente. Sofia, un bebe de dos años, inacreditablemente, está conduciendo la integración de Jimmy “al mundo chimpancé”. Un mundo desconocido y extraño para él, que se siente humano y reacciona como tal.
La sesión de aproximación termina, cuando Jimmy percibe que las tratadoras llegaron para limpiar los comedores y abrir los dormitorios. El se transforma, nosotros ya no existimos más, comienza a quedarse excitado, tiene una erección evidente, va a buscar las frazadas y busca desesperadamente la presencia femenina. El emite sonidos de satisfacción, de ansiedad, algo que nunca hace cuando está con nosotros. Retiro a Samantha y a Sofia del corredor y lo dejo sólo con su locura. Su mente perturbada en aquel Zoológico miserable lo convirtió en algo desconocido.
Las tratadoras se aproximan, el coloca la frazada en el piso y se masturba hasta el cansacio. Su mente viaja y sale de la realidad. Tenemos chimpancés que se comportan así con mujeres, especialmente desconocidas. Es el caso de Alex, que vive con Carolina, su gran amiga, pero con quién no tiene relaciones intimas, solamente existen cariño y afecto de la compañía. Pero lo de Jimmy es enfermizo. Quisieramos ser psiquiatras y que Jimmy hablase, para contarnos su historia, para poder entender mejor aquella mente perturbada y hacer algo para ayudarlo.
Quizás Sofia – una bebe – lo regrese a la realidad. Samantha tiene curiosidad por él, pero también tiene recelo, lo encuentra extraño, diferente de sus compañeros del Santuario, que fueron criados con ella. Jimmy la observa con curiosidad, Samantha está nuevamente entrando en su periodo reproductivo, como lo demuestra su trasero. Jimmy la observa con sorpresa, tal vez nunca vió una chimpancé hembra cerca del celo, pero no se excita con aquella imagen, como sus compañeros del Santuario. El tiene una mente humana, las mujeres son su objeto de deseo.
El grupo de rescate que estuvo en el Zoológico de Niteroi (Zoonit) nos dijo que los tratadores allí eran masculinos, no existían mujeres en su circulo intimo. Cómo él adquirió esa fijación por el sexo femenino? Alguién, en algun momento de su vida, lo indujo a comportarse como un Homo sapiens frente a una mujer, también sapiens?
Sentado en el corredor, presenciando a Sofia en su actividad frenética y con sus juegos, nos sentimos confortados. Sabemos que Jimmy está conociendo un nuevo mundo – su mundo – de donde nunca debería haber sido arrancado para divertir humanos, por la optica de una “garotinha” inocente e hiperactiva que cada dia lo cautiva mas.
Dr. Pedro A. Ynterian
Presidente, Proyecto GAP Internacional