Lo absurdo de un zoológico
publicado en 20 Sep 2012

En la decada de los 80, treinta babuinos africanos, de la especie Papio hamadryas, procedentes de Europa, fueron donados para un Zoológico Uruguayo, en un barrio residencial de Vila Dolores, en Montevideo.

Como no tenian espacio suficiente, fueron enviados para el Parque Lecocq, donde ya existían 500 animales de 33 especies diferentes en cautiverio.

Los babuinos fueron colocados todos juntos en un recinto, tipo jaula, de más de 2.000 metros cuadrados, donde existía alguna arborización y un lago.

Sin control ningun de su reproducción, en tres decadas la población se multiplicó 4 veces y hoy existen entre 120 y 130 individuos, en el mismo espacio original. Los babuinos son hiperactivos y acabaron con toda la vegetación existente, convirtiendo el recinto en un desierto, comiendo hasta las raices de la propia hierba existente.

Ahora las autoridades examinan qué hacer por esta falta de previsión y planean su traslado a algun local que los acepte.

Es muy posible que estos infelices terminen en laboratorios de tortura médica en algún pais del primer mundo, que son los úncios que los aceptarían, donde van a terminar muriendo debido a las experiencias médicas invasivas a que serán sometidos.

Dr. Pedro A. Ynterian
Presidente, Proyecto GAP Internacional

Fuente: El Nuevo Herald (USA)