Las barbaras torturas a una inocente
publicado en 17 Ago 2011

KATRINA, Nº CB0422, 29 AÑOS

Katrina fue anestesiada o sedada 295 veces en su vida. Sufrió también 36 biopsias de higado. El 16 de enero de 1985, su higado fue perforado 3 veces hasta obtener una muestra de tejido hepático que satisfaciera a sus torturadores. Las biopsias del higado son realizadas con la introducción de una aguja de acero a través de la pared abdominal, hasta llegar al higado, siendo entonces la muestra aspirada. Generalmente, aunque no siempre, los chimpancés son anestesiados para hacer este procedimiento, pero el dolor que el mismo genera posteriormente no es mitigado con analgésicos, ellos lo sufren. Este fue el caso de Katrina.

Entre el 24 de mayo de 1994 y octubre de 1996, Katrina sufrió 4 biopsias rectales, una cervical, lavados vaginales, swabs rectales y 3 biopsias de nodulos linfáticos. El 24 de noviembre de 1994, después de despertarse de la anestesia con Ketamina, que produce alucinaciones, y puede causar delirio y tendencias suicidas, incluyendo auto-mutilaciones, ella se arrancó su dedo gordo de la mano izquierda.

Katrina nació en cautiverio, en el centro de torturas médicas llamado SNPRC (Southwest National Primate Research Center), en San Antonio, Texas. Fue retirada de su madre a los dos dias de nacida, como era usual y fue criada por monstruos humanos que allí trabajaban. A los 9 meses, fue transferida para otro centro tenebroso de torturas médicas, llamado LEMPSIP (Laboratory for Experimental Medicine and Surgery in Primates). Durante 14 años fue torturada como lo describimos anteriormente. En 1997 fue transferida para la Fundación Coulston, en el Estado de Nuevo Mexico, otro centro tenebroso de tortura y reproducción de chimpancés que quebró el 25 de febrero del 2002, siendo transferida para otro establecimiento, el APF, aguardando nuevo destino de tortura.

Katrina no cometió ningun crimen, vivió encarcelada toda su vida y todo su cuerpo está infectado con enfermedades terribles, como Hepatitis B, C y HIV. Su higado está destruido y su salud debilitada, sin embargo, los monstruos que la condenaron a esta vida miserable, todavia no estan satisfechos: quieren enviarla de vuelta adonde ella nació, al SNPRC, presentado en la propaganda oficial para el publico “como un centro de excelencia en la investigación biomédica innovadora con primates no humanos”.

Quién denuncia esto no somos nosotros, no son ambientalistas radicales, no son defensores de la causa animal, SON LOS PROPIOS MEDICOS – colegas de aquellos monstruos que han torturado esta infeliz durante 29 años, y que todavia quieren continuar haciendolo hasta su muerte inexorable. El Comité Norteamericano de Médicos por una Medicina Responsable (PCRM) clama para que este suplicio de Katrina y sus otros 13 chimpancés, que esperan una decisión del Gobierno Norteamericano, cese, y que ellos no terminen de nuevo en las manos de los criminales que hacen palidecer a sus similares nazistas de la decada de los 40.

Salvemos a Katrina y a sus 13 compañeros de más torturas! Denunciemos que en los Estados Unidos, país más desarrollado del Planeta, es donde todavia más la tortura se practica contra inocentes.

Dr. Pedro A. Ynterian
Presidente, Proyecto GAP Internacional