La chimpancé Cecilia llegó en abril de 2017 en el Santuario de Grandes Primates de Sorocaba, en São Paulo, afiliado al Proyecto GAP, e hizo historia. Ella fue la primera chimpancé del mundo en disfrutar del derecho de Habeas Corpus, cuando la Justicia de Argentina permitió su traslado del zoológico de Mendoza al santuario brasileño.
La adaptación de Cecilia fue muy buena y algunos meses después de su llegada ya comenzó a convivir con un compañero, el chimpancé Marcelino.
Según el equipo del santuario que acompaña a Cecilia, ella está muy bien de salud y se encuentra totalmente adaptada a la vida en el Santuario.
Ver más detalles de su adaptación en estos casi dos años:
«Ella se alimenta muy bien y le gusta varios tipos de frutas y hojas. Continúa conviviendo con su compañero Marcelino, que le gusta mucho de ella y está siempre cerca. En algunas ocasiones en que hubo que separarlos momentáneamente, ambos se preocuparon el uno con el otro y Marcelino llega a vocalizar para llamarla. Cecilia tiene buena relación con su cuidador, pero prefiere interactuar con otros chimpancés, muy diferente de cuando ella llegó, cuando tenía mucho miedo. Cecília gusta de interactuar con Luke, un varón adulto que es su vecino de recinto, y lo hace todo para llamar su atención. Otro vecino que Cecilia interactúa es Martin. Recientemente se mostró muy interesada por él y ellos permanecen varias horas interactuando por la ventana. Otro punto positivo es que Cecilia presenta varios comportamientos naturales para especie que evolucionaron mucho desde que ella llegó, pues al principio ella se mostraba muy apática y ni siquiera vocalizaba como los otros chimpancés.
Veterinarias Camila Gentile y Juliana Kihara