Desde el Santuario Save the Chimps
Lamentamos compartir que Frieda falleció inesperadamente la semana pasada por causas naturales. Ella, era un miembro querido de la familia Rufus y siempre será recordada por su naturaleza dulce y amorosa.
Frieda nació el 21 de noviembre de 1981, en la Base de la Fuerza Aérea Holloman en Alamogordo, Nuevo México. A los tres meses, la separaron de su madre y la enviaron a la guardería del laboratorio para que el equipo la criara. Un mes después, fuÉ enviada a la Universidad de Pensilvania para realizar una investigación cognitiva. A los seis años, la enviaron de regreso a Nuevo México, donde la utilizaron para investigaciones invasivas y entró en el programa de cría. Dió a luz en seis ocasiones, la última vez dió a luz a trillizos. Algunos de sus bebés murieron al nacer y los bebés sobrevivientes le fueron quitados y enviados a la guardería del laboratorio.
Su vida cambió en 2002, cuando fué rescatada por Save the Chimps. Se formaron grupos familiares y Frieda se convirtió en miembro del grupo más grande, de la familia Rufus. Hizo muchos amigos en su grupo, convirtiéndose en una de las hembras más dominantes de su familia. Ella era muy respetada por los miembros masculinos y femeninos de su familia. Su mejor amigo era Rufus, pero Frieda también era amiga cercana de Arnulfo y Amber.
A Frieda le encantaba hacer nidos y siempre llevaba consigo una o más mantas, que solía arrojar en la espalda y llevarse a la isla. Cuando dejaba mantas en los toboganes de la isla para irse, la llamábamos para que se las quitara y Frieda siempre nos hacía este favor con amabilidad.
A Frieda le ENCANTABAN las verduras, especialmente la lechuga romana, que fué parte de la última cena que disfrutó con su familia. La pérdida de Frieda dejará un hueco permanente en su familia de Chimpancés y en el corazón de su familia humana. Siempre será recordada como un gigante gentil con una de las almas más amorosas. Nos reconforta saber que ella está en el Puente Arcoíris, con sus queridos amigos Rufus y Arnulfo.