Oumou y Nana, se abrazan desesperadamente, entre ellas. Son bebés pequeños, que parecen mellizos, pero la verdad es que, acabaron de conocerse. El miedo y la confusión las domina, cuando escuchan el bramido de los autos, hombres gritando – visiones y olores extraños, que nunca habían vivido antes.

Todo lo que ellas ya conocieron, es prenderse a los pechos de la madre y los aromas que emanan de la floresta. Más, su hogar no está a la vista y sus madres están muertas -asesinadas al frente de sus ojos.

Ellas están siendo contrabandeadas, a través de la frontera con Guiné. Esos Chimpancés, fueron arrastrados para el comercio clandestino, de animales exósticos; todavía bebés. El raptor, es un conocido traficante de animales salvajes, que se evadió de la prisión e irá venderlas, para el mejor lance. Esos bebés serán separados y nunca más, podrán ver otro Chimpancé. Ellos viviran el resto de sus vidas, como prisioneros en jaulas de metal, oscuras.

Rescatadas a tiempo

Ellos fueron llevados para el Chimpanzee Conservation Center(CCC), un Santuario miembro del PASA, en las remotas florestas de Guiné.

Oumou(que se pronuncia “Oo-moo”), todavía está traumatizada por la violencia de su captura en la floresta. Ella, no se olvidó de ver a los cazadores, abatiendo a su familia. Cuando las personas se aproximan, ella se esconde atrás de Nana y la abraza frenéticamente. Nana, protege mucho a su pequeña “hermana” y cobija Oumou, cuando entra en pánico.

Oumou y Nana, son apenas dos de los seis huérfanos, que llegaron al Santuario desde el mes de Diciembre. La mayoría de ellos, precisan ser alimantados con mamaderas de leche, cuatro veces por día. Los recursos del Santuario, están sobrecargados, por esa avalancha de Chimpancés infantiles y el equipo, mal consigue atenderlos. Ustedes, nos van a ayudar?

Tán sólo USD 40,00 cubriran el total de la leche, tratamiento veterinario y la alimentación de Oumou y Nana, por UNA SEMANA.

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