ORANGUTANES DE INDONESIA
Las dos hembras de orangutanes estavan preocupadas, nunca habían viajado de helicoptero. De repente los motores se apagaron y el gran pajaro reposó en un claro de la selva. Las cajas que las transportan son depositadas en la tierra, cerca de los árboles.
Se deja salir primero a Tantri, la más joven de ambas. Ella no salta en las arboles de inmediato, va y se sube en la caja, donde todavia está su compañera. Está ansiosa. Tal vez se pregunte “Floresta: soy libre”, o “Estoy soñando?” En ese momento se llenó de coraje y subió en el arbol más proximo.
Ya Tantri ambientada, la caja de Monic fue abierta y ella no dudó, saltó directo en los árboles.
El helicoptero partió de nuevo dejando un rastro de aprensión, sin embargo no demoró en regresar. Había ido en busca de Astrid y Tarzan, que aguardaban en un local proximo. Junto con los dos orangutanes viajó para el punto de reencuentro el Dr. Jamartin Sihite, Presidente de la Fundación BOS que patrocina estas reintroducciones.
Astrid fue la primera en ver la libertad y sin titubear se adentró en la selva. El plan era darle un tiempo a Tarzan para ambientarse y soltarlo un poco más tarde. Tarzan todavia no estava totalmente recuperado de la anestesia.
El tiempo se estaba cerrando y el piloto del helicoptero solicitó que todos entrasen en el mismo, para regresar. Tarzan se quedó solo bajo la responsabilidad del veterinario Agus, que decidió dar un contra anestesico para acelerar su recuperación. En el momento que el helicoptero se elevaba en los cielos, señales frenéticos de abajo indicaban que Tarzan ya había sido libertado y se había sumergido en la selva. Lágrimas brotaron de todo aquel grupo de tratadores y técnicos, que planificaron y consiguieron, devolver a su mundo, los 4 orangutanes que habían sido arrancados del mismo, en un día aciago de sus vidas.
Dr. Pedro A. Ynterian
Presidente, Proyecto GAP Internacional