Cesar ha cumplido 1 año de vida en el pasado 10 de Diciembre. Como sus hermanas, la madre Samantha, no los amamantó y tuvimos que criarlo nosotros. Esta vez fue diferente, ya que Cesar durante el día quedaba en el Santuario, en su recinto, ya por la tarde y la noche iba para la casa de su tratadora Meire, en el propio Santuario, donde ella vive con su familia.
Cesar lleva un año viviendo como humano y con humanos, sin embargo, conviviendo también con chimpancés. El ya juega con su hermana Suzi y conoce a algunos de sus compañeros adultos, así como a su madre biologica Samantha.
Días atrás llevamos a Cesar a visitar su abuela Ditty, que tiene una hija, Cecilia – tia de Cesar – de más de 2 años de edad y cuando comparamos a ambos, se ve claramente que Cesar, con un año es el doble del tamaño de Cecilia, que le lleva más del doble en edad.
Es algo que también ya observamos en sus hermanas, cuando las comparabamos con los otros bebes nacidos en el Santuario y que viven con sus madres biologicas. El tratamiento humano, desarrolla los chimpancés aceleradamente en todo sentido, doblando su tamaño comparados con los que se criaron en su familia biologica.
Sin embargo, además de esto, Cesar es muy humanizado, más que Guga y su grupo pionero, que también convivió con nosotros algunos años, hasta quedarse independiente en su territorio.
Pensamos que Cesar nos sorprenderá, ya que además de las caracteristicas tipicas de su especie, va a adquirir caracteristicas humanas, que lo convertirán en un ser extraordinariamente evolucionado, que terminará siendo el lider de un grupo de chimpancés jovenes brasileños, que viven en el Santuario y perpetuarán la existencia de su especie en el nuevo mundo.
Dr. Pedro A. Ynterian
Presidente, Proyecto GAP Internacional
Imágenes de César en el Santuario de Grandes Primates de Sorocaba – Brasil: